Los delegados del gremio ATE que nuclea y contiene a gran parte de los empleados municipales en la localidad de Quilino, hablaron con Mira El Norte de los proyectos que conforman la lucha que emprendieron para dar pelea a la complicada situación laboral y económica que arrastran desde la gestión de Soledad Carrizo, y que continúan con la del intendente Ariel Rivero.

 

Gustavo Lira, Víctor Perez y Cristian Sosa pretenden establecer una mesa de diálogo con el jefe del ejecutivo que no los reconoce como gremio y para lograr  ese objetivo antes de comenzar con las medidas judiciales,  tuvieron que recurrir al apoyo de los concejales. 

 

En la sensible entrevista, los representantes también detallaron la precarización laboral y las presiones a las que son sometidos los trabajadores que no se animan a denunciar por temor a represalias. 

 

En otro punto, los delegados calificaron los haberes mensuales que perciben los empleados “como sueldos de hambre”, y aseguran que en la actualidad es el más bajo de toda la provincia de Córdoba.