A través de una libre orden de secuestro que diligenciaron oficiales de justicia solicitada la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), la Cooperativa de Luz de Quilino sufrió la confiscación de dos vehículos que estaban afectados al mantenimiento de redes. 

 

Según indicaron fuentes judiciales, el embargo se consumó a raíz de una deuda millonaria que contrajo la empresa proveedora de energía con el organismo nacional en las últimas gestiones. Por otro lado, alertaron que de no cancelar el compromiso en los próximos días podrían producirse otras incautaciones. 

 

Consultado con un profesional contable, indicó que esta medida cautelar se da luego de varias intimaciones por parte del fisco, lo que haría presumir que el Consejo de Administración estaba al tanto del emplazamiento. Sin embargo, en un medio radial de la localidad, el gerente de la Cooperativa Oscar Mansilla desconoció la situación y expresó que las intimaciones podrían haber sido llevadas a otro domicilio. 

 

Para conocer el tema de cerca, Mira El Norte dialogó con el exgerente de la Cooperativa de Luz de Quilino Nicolás Lobos, quien explicó como fue el procedimiento civil que llevó adelante la justicia. El exadministrador se expresó con datos precisos y aseguró que la deuda con el Afip rondaría los $21 millones de pesos. “A esto hay que sumarle la deuda de Epec que hasta hace 3 meses atrás estaba arriba de los $11 millones de pesos, y nos han confirmando que están pagando cerca de $20 mil pesos de interés diarios”, explicó