Un hombre mayor de edad fue detenido en las últimas horas y se sospecha que participó del crimen del guardia de seguridad en barrio José Hernández de la ciudad de Córdoba, indicaron fuentes policiales.

 

Además se secuestró un vehículo VW Gol, color blanco, con el cual se habría llevado adelante el asalto a un local el sábado pasado. La División Homicidios de la Policía llevó adelante los procedimientos en barrio José Ignacio Díaz.

 

Fuentes ligadas a la investigación no descartan más detenciones en las próximas horas.

 

Los ladrones ya tenían la moto de un delivery, a fuerza de haberlo golpeado a culatazos; ya habían amenazado a la dueña de la rotisería y a otras personas, a puro balazo para que se encerraran y no hicieran nada. Fue entonces que por la calle Azul al 2900 apareció un motociclista que, junto a su compañera, se topó de lleno con la banda.

 

Era un guardia de seguridad barrial. Según el relato de los vecinos, el guardia pasaba “por casualidad” por el lugar, cuando fue ultimado de un balazo.

 

Uno de los criminales, levantó la pistola y le disparó directo a la cabeza.

 

Walter Daniel Leiva tenía 40 años. Vivía con su familia a pocas cuadras. Volvía de un asado por el Día del Trabajador.

 

En la madrugada del domingo finalmente murió en el Hospital de Urgencias de Córdoba, tras agonizar varias horas, mientras el cuerpo médico hacía lo imposible por salvarlo. El asalto se produjo el sábado 1 de mayo.

 

Leiva se convirtió en una víctima fatal de una preocupante y creciente ola delictiva que se viene registrando en distintos puntos de Córdoba Capital y el Gran Córdoba. Robos callejeros y asaltos contra comercios y viviendas se suceden sin freno con víctimas heridas.

 

 

En ese marco, según se sospecha, la patota había salido de cacería y recorría la zona al voleo. Ya los habían visto merodear y queriendo asaltar a una familia.

 

Todo se desmadró pasadas las 22 del sábado.

 

De la lomitería “Monte Piedra” acababa de partir Gerardo Ponce (37) en su motocicleta 110 negra. El repartidor llevaba un pedido para entregar a una familia. El delivery frenó unos instantes para atender el celular. Fue en ese momento que apareció el auto blanco. El coche clavó los frenos y se bajaron tres delincuentes.