El domingo 14 de abril del año 2019 la localidad de Quilino vivió un hecho civil histórico. Es que con el casi el cincuenta por ciento de los votos Mabel Godoy derrotaba en las urnas a la gran estructura de la Unión Cívica Radical comandada por la Diputada Nacional, Soledad Carrizo, y el intendente de ese entonces, Ariel Rivero. 

 

Tras varios meses de negociación, la mujer que representó al PRO en el Concejo Deliberante durante cuatro años logró sellar un acuerdo político con PJ cordobés y con todo el arco opositor que le permitió aunar todas la voces discrepantes al oficialismo. 

 

Muy bien posicionada en las encuestas y con la bendición del Gobernador Juan Schiaretti a través de su esposa, Alejandra Vigo, Godoy encabezó con un sello vecinalista (Unión Vecinal Federal) una desleal y dura campaña política que tuvo hasta los medios de comunicación locales en contra.  

 

Dentro circuito político provincial el triunfo de Mabel Godoy tuvo una fuerte percusión puesto que tuvo que confrontar con el aparato municipal de la URC y de casi el cien por ciento de las instituciones del pueblo que eran controladas por esta organización, con el agravante que una de ellas, la Cooperativa de Luz, se encontraba envuelta en una investigación judicial que tenía y tiene entre los principales imputados al ex Intendente Rivero y a Cecilia Carrizo, hermana de la Diputada Nacional (ambos ex funcionarios de la institución).

 

Además del contundente respaldo de la sociedad que en las últimas tres elecciones de voto popular había vetado el proyecto de la UCR, la propuesta de la alianza vecinal que se basó en tres ejes; la educación, honestidad y transparencia obtuvo el apoyo de ex figuras de la política y de empresarios de la zona. 

 

A un año de esa trascendental contienda electoral y a pesar de los serios problemas económicos que presenta la administración que heredó, Mabel tuvo un momento para recordar ese día. 

 

“Fue un día inolvidable para los habitantes de nuestra localidad que estaba sometida a un sistema de gobierno sospechado de corrupción, miedo y clientelismo político, creo que la sociedad recién ahora puede respirar tranquila y se puede expresar sin miedo a represalias”, expresó Mabel al respecto.

 

“Nosotros solo fuimos un instrumento que Dios puso en el camino de la gente, ellos son los que deben recordar este día como una batalla ganada, nosotros hemos demostrado en el poco tiempo de gestión que llevamos que somos otra cosa, una propuesta solidaria, sana y responsable con los servicios sensibles que brindamos a la sociedad”, agregó.

 

- ¿Qué recuerda de ese momento?

 

Muchas cosas, a una señora de 90 años que me votó sin que la fuéramos a buscar con un bolsón, ahí me di cuenta que la comunidad pedía a gritos un cambio de aires. También tengo en mis recuerdos la llegada de Víctor Maggi a nuestro local partidario con lágrimas en sus ojos, con quien me fundí en un abrazo interminable que hasta hoy tengo guardado en mi corazón. Tampoco me puedo olvidar de la emoción que tenía todo mi equipo de trabajo que dejó muchas cosas de lado para ganar esa elección, una elección que nos dio la responsabilidad más importante de nuestras vida: la contruir un pueblo con esperanza. 

 

Discurso de cierre de campaña