Con un Talleres que volvió a perder, en este caso por 1 a 0 ante Racing Club de Avellaneda, la pregunta en la sala de prensa del Cilindro volvió a ser la misma para el entrenador Ángel Guillermo Hoyos.

 

“¿Si tengo fuerzas para seguir y sostener el proyecto? Las fuerzas para seguir siempre están”. De esta manera, Hoyos volvió a dejar claro que no existe en él la posibilidad de dar un paso al costado por más que el equipo albiazul esté penúltimo con dos puntos en la Zona 1 de la Copa de la Liga Profesional, al cabo de cinco fechas en las que no ganó, ni tampoco tuvo el protagonismo ni la disponibilidad del plantel que se esperaba.

 

Hoyos ya supo decir que “renunciar no forma parte” de su vida, que ya revirtió comienzos así cuando estuvo en Bolívar y Universidad del Chile, con los que terminó siendo campeón y que un resultado ante la Academia no lo “condicionaba”.

 

La semana pasada también se lo habían consultado tras la derrota con Newell’s Old Boys por 2-1.

 

“No renuncié cuando hablé con el presidente Andrés Fassi al final del partido. Yo vivo con Dios, la Virgen y no miento”, había dicho el jueves pasado, en el centro de Alto Rendimiento Amadeo Nuccetelli.

 

La agenda de Talleres indica que recibirá a San Lorenzo, el sábado a las 21.30, en el Kempes, pero en poco tiempo más estará jugando Copa Argentina (arranca el miércoles 16 ante Güemes, en Salta) y Copa Libertadores, desde abril.

 

Y no es un tema menor porque, más allá de plazos para el DT, habrá que elegir bien a qué torneo se le da prioridad por la cuestión física.

 

En el primer semestre de 2021, la “T” jugó con lo mejor en la Sudamericana, mientras que en la Copa de la Liga Profesional hubo alternancia.

 

En el torneo continental fue donde más lesionados debió sufrir Talleres; entre ellos, Diego Valoyes, Guilherme Parede y Federico Navarro, piezas claves en ese momento.

 

FASSI AL DT Y AL PLANTEL DE TALLERES

“Costó empezar. Todos los procesos, a veces, necesitan de tiempos. Fueron tres meses con Frank Darío Kudelka; luego pasó con Juan Pablo Vojvoda y Alexander Medina. En determinado momento, de 18 puntos sacamos uno con Medina”, dijo el presidente de Talleres, Andrés Fassi, en el estadio Miguel Sancho, hacia donde se llegó el jueves pasado para el partido entre Racing de Nueva Italia y Atenas de Uruguay.

 

El empresario -que habló casi en modo conferencia de prensa- compró el club del ascenso “charrúa” y allí están sus hijos: Juan Pablo Fassi es el presidente -exdirector deportivo de Talleres- y Sebastián Fassi es uno de los arqueros del plantel.

 

El titular albiazul jamás echó a un entrenador desde que se hizo cargo de Talleres a fines de 2014. Quienes se fueron del club, como el propio Hoyos y los mencionados Kudelka, Vojvoda y Medina, lo hicieron tras no renovar el contrato.

 

Sin embargo, llamó la atención que haya bajado al vestuario para hablar con el DT como ocurrió tras el partido ante Newell’s.

 

“Todos los procesos, a veces, necesitan tiempo y de los intérpretes importantes que tiene un plantel. Este plantel todavía no está completo. Por distintas circunstancias, han habido seis o siete jugadores importantes fuera. Creo que ya hoy Talleres empieza. Sabíamos que iba a ser un torneo de menos a más. Soy muy optimista para todo lo que viene”, agregó Fassi. ¿El “hoy empieza Talleres” es porque ya está casi todo el plantel a disposición? Se verá, pero el máximo directivo albiazul tampoco está conforme.

 

Fassi también se dirigió al plantel, sobre todo para la vuelta de la “T” a jugar Fase de Grupos de la Copa Libertadores, algo que no hacía desde 2002, ya que en 2019 fue al repechaje. “Faltan 40 días para la Copa Libertadores. Hay partidos trascendentales para el objetivo de Talleres en la Liga. Soy consciente y la responsabilidad la asumimos entre todos. El plantel lo sabe. Hace casi 20 años que no teníamos esta chance. Trataremos de prepararnos de la mejor forma. Ojalá el hincha se sienta conforme con lo que podamos generar en la Libertadores y le demos una alegría”, comentó Fassi.

 

Talleres vive esa previa, pero está claro que no es la ideal