Violencia de género. Martín Gill va a juicio: la Justicia pidió la elevación para que sea juzgado por un tribunal

La jueza de Control de Villa María, María Dottori, rechazó un planteo de la defensa del ministro en uso de licencia para anular el juicio. El funcionario deberá responder por lesiones leves calificadas.

Judiciales 08/11/2024

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Martín Gill, ministro de Cooperativas y Mutuales de la provincia de Córdoba –en su de licencia–, se encamina a enfrentar un tribunal que lo juzgue por hechos de violencia de género denunciados por una expareja suya mientras era intendente de la ciudad de Villa María.
 
En una resolución de 104 páginas, la jueza de Control de Villa María, María Soledad Dottori, confirmó la elevación a juicio luego de rechazar un planteo interpuesto por la defensa de Gill, que cuestionó la actuación de la fiscal del caso Juliana Companys.
 
El funcionario provincial, que pidió licencia a mediados de septiembre pasado, deberá responder por el delito de lesiones leves calificadas en perjuicio de Lourdes Astudillo.
 
La investigación comenzó en marzo del año pasado cuando Astudillo, que había sido pareja del entonces intendente de Villa María, se presentó ante la Justicia para denunciar hechos de violencia física y amenazas. A los pocos días, se conoció la imputación cuando Gill se presentó en la Unidad Judicial para devolver elementos que la mujer había dejado en la casa que compartían.
 
La elevación a juicio fue solicitada en marzo de este año por la fiscal Companys. La defensa de Gill, ejercida por el abogado Eduardo Rodríguez, pidió por escrito la nulidad de lo requerido por la fiscal. Este viernes, la jueza de Control rechazó el planteo de la defensa y avaló la investigación de Companys.
 
Así lo planteó la jueza Dottori: “En virtud de todo lo expuesto, encuentro que las pruebas reunidas en el curso de esta instrucción tienen aptitud lógica y valor convictivo suficiente para arribar al estado intelectual de probabilidad que se exige en esta instancia para sustentar la acusación del imputado Martin Rodrigo Gill en juicio oral, habiéndose asegurado las garantías del debido proceso y defensa en juicio durante la investigación penal preparatoria”.
 
Desde el pedido inicial de elevación a juicio fue creciente la presión de la oposición política para que Gill renuncie al Ministerio que encabezaba. Fueron numerosos los planteos del interbloque de Juntos por el Cambio y hasta hubo un pedido de juicio político del legislador Gregorio Hernández Maqueda. El oficialismo resistió las embestidas opositoras, pese a que varias voces dentro de Hacemos Unidos también consideraban que el ministro debía alejarse del cargo.
 
El descargo de Gill al pedir licencia
 
“Siempre estuve a disposición de la Justicia, me presenté voluntariamente, declaré, amplié mi declaración y aporté numerosos elementos porque soy inocente”, indicó Gill al momento de pedir su licencia. El exintendente de Villa María dijo en aquel momento que prefería esperar la resolución de la causa judicial sin ocupar el cargo.
 
Y amplió: “Confío en que la resolución será favorable y volveré al Ministerio cuando el tema esté resuelto”.
 
De qué se lo acusa a Gill
 
La jueza Dottori describió en la resolución de elevación a juicio los dos hechos por los que deberá responder ante la Justicia Gill y que fueron investigados por la fiscal Companys.
 
Primer hecho: “El día 03 de diciembre del 2022, en un horario no determinado pero que se ubicaría en horas de la madrugada, en circunstancias en que el imputado Martín Rodrigo Gill se encontraba en su departamento ubicado en calle Rawson nº 1180 piso 3º dpto. “D” de la ciudad de Villa María provincia de Córdoba, junto a su pareja María Rosa de Lourdes Astudillo, se inició una discusión entre ambos, por la falta de preservativos y pastillas en un cajón, oportunidad en que el incoado Gill, con intenciones de causar un daño en el cuerpo o en la salud de su víctima, tomó de los brazos a Astudillo, zamarreándola. Que producto del accionar violento del imputado Gill, la damnificada Astudillo sufrió las siguientes lesiones: “brazo derecho: hematoma en región antero externa tercio distal de 5 cm. aproximadamente, hematoma en región anterior tercio proximal de 5 cm aproximadamente”, lesiones por las que el médico forense Dr. Gustavo Rodríguez asignó 15 días de curación e inhabilitación s/c.”.
 
Segundo hecho: “El día 28 de enero del 2023, en horario no determinado pero presumiblemente en horas de la noche, en circunstancias en que el imputado Martín Rodrigo Gill se encontraba en el departamento de su pareja María Rosa de Lourdes Astudillo sito en calle Santa Fe nº 1348 6º piso departamento “E” de la ciudad de Villa María provincia de Córdoba, se inició una discusión por cuestiones del momento, motivo por el cual el imputado se retiró del departamento y empezó a bajar por las escaleras mientras Astudillo lo seguía por detrás, en estas circunstancia el incoado Gill con la intención de causar un daño en el cuerpo o en la salud de su pareja, la tomó de los brazos y comenzó a empujarla contra la pared mientras Astudillo reclamaba por las llaves del departamento. Que, como consecuencia del accionar violento del imputado Gill, la Sra. Astudillo sufrió las siguientes lesiones: “…En hombro derecho: hematoma en región posterior del hombro de 4 cm aproximadamente. Abdomen hematoma en región anterior del abdomen, fosa iliaca derecha de 6 cm de longitud por 3 de ancho. Mano izquierda excoriación peri-ungueal en dedo anular. Antebrazo derecho. Hematoma en tercio medio, región anterior de 5 cm de diámetro aproximadamente. Hematoma en tercio proximal, región anterior de 5 cm de diámetro. Brazo izquierdo: hematoma en región interna, tercio medio, de 7 cm de longitud por 4 de ancho”, lesiones por las que el médico forense Dr. Gustavo Rodríguez asignó 15 días de curación e inhabilitación para el trabajo, s/c.”.
 
Al declarar por primera vez en la causa, en agosto de 2023, Gill rechazó de plano haber sido violento con su expareja. Así lo planteó: “Quiero afirmar que nunca efectué ningún tipo de agresión ni física, ni verbal contra Lourdes, ni contra cualquier otra persona tanto en la faz privada como en la vida pública nunca he usado un recurso de violencia física, ni verbal de cualquier otro tipo en las relaciones personales y esto también se aplicó en la relación que tuve con Lourdes”.

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