El hombre que mató a su hijo al confundirlo con un ladrón quedó en libertad. Así lo confirmó la fiscalía después de haber cambiado la calificación legal del hecho registrado el sábado a la noche en barrio Guiñazú.

 

Luego de ser baleado, Rodrigo Padilla Marcani (20) ingresó sin vida al Hospital Elpidio Torres. Inmediatamente la Policía detuvo al padre, Víctor Hugo Padilla Pérez (49), quien declaró que disparó al escuchar ruidos en el patio de su casa y suponiendo que pretendían robar.

 

“A partir de la numerosa prueba reunida se ha dispuesto modificar la calificación legal primigenia del hecho por la de homicidio culposo”, indicó la Fiscalía de Instrucción en Violencia de Género y Familiar del Quinto Turno.

 

De esta manera, se ordenó la libertad del imputado “en atención a que no existen indicadores de riesgo de fuga o entorpecimiento de la investigación”.

 

En un comunicado difundido por el Ministerio Público Fiscal advirtieron que “el proceso continuará su curso con el imputado en libertad mientras se practican el resto de las medidas probatorias pertinentes”.