Los clubes que conforman la Liga Ischilín de Fútbol son los únicos de la provincia de Córdoba que no participan este año de un campeonato regional. 

 

Este malestar que emerge de los dirigentes de las instituciones deportivas por este tema se ha trasladado hacia los jugadores, que toman esta competencia como un incentivo de mayor exigencia que les permite mantener continuidad deportiva durante los meses de verano. 

 

En 2018 ese campeonato fue de envergadura y tuvo mucha repercusión en la zona por la participación de Ligas alto nivel en varias categorías. Distinto fue en 2019 que solo incluyó la presencia de cinco clubes de la misma Liga; Sportivo Deán Funes, Atlético Ischilín; Falucho, Unión Deportiva Norte y San Martín de la Dormida.

 

¿Por qué no se juega?

 

El motivo es que la Liga Ischilín no está adherida a ninguna Federación y se desconoce en qué situación administrativa se encuentra por el hermetismo que guardan desde la institución . 

 

Hasta el año pasado, la Liga Ischilín conformó la Unión de Ligas del Centro integrada por la Liga Cordobesa, Villa Maria, Punilla, Río Cuarto. Esta alianza fue sellada en el año 2016 y en el caso de la nuestra, aparentemente fue sin el consenso de todos los clubes que la conforman. 

 

Tres años después, en año 2019, el proyecto no prosperó y las otras cuatro retornaron a la Federación Cordobesa de Fútbol y este año forman parte del fixture del torneo provincial.

 

¿Partida con problemas judiciales? 

 

El actual presidente de la Liga Ischilín, Mario Rojo, dejaría el cargo en el mes de febrero cuando se consume de una vez por todas la asamblea general ordinaria y se elijan las nuevas autoridades del Consejo Directivo, pero luego de su salida algunos presidentes analizan iniciar acciones legales por la actitud que tuvo Rojo de desafiliarse de la Federación Cordobesa por su cuenta.  

 

Mira El Norte

 

José Toledo, abordó el tema en su programa Mirada Política y fue más allá incluyendo a los delegados como cómplices de la maniobra.