El club Independiente de Quilino no está pasando por su mejor momento a nivel dirigencial. Hace unos días, renunció su presidente, Nahuel Lucero, y su lugar fue ocupado por la vicepresidenta, Soledad Ávila.

 

Paralelamente, en lo deportivo, el conjunto de primera división contrasta con su faceta administrativa y es uno de los mejores equipos del campeonato de la Liga Ischilín de Fútbol, liderando la zona "B" con 14 puntos.

 

Le siguen Sportivo DF, Talleres de Quilino y Unión de las Salinas con 8 puntos, y Alem y Villa Gutiérrez con 7.

 

Hasta esta instancia del campeonato, "Los Diablos Rojos" y su gente se ilusionan con pelear hasta lo más alto y sueñan con finalizar entre los cuatro mejores del torneo.

 

La renovación generacional en el plantel es una de las claves del buen presente, y solo tres jugadores sobreviven de aquel campeonato que Independiente de Quilino obtuvo en el año 2016, bajo la dirección técnica de Oscar Mansilla (Iván Corzo, Héctor Pereyra y Gonzalo Corzo).

 

Además de ser parte del primer equipo, el esfuerzo y el sentimiento de varios jugadores también se traslada a colaborar con la dirigencia para sostener a la institución en este momento delicado a nivel institucional, pero provechoso en lo deportivo.